De izquierda a derecha: Laura Pollán, Berta Soler, Reina Luisa Tamayo, Marta Díaz Rondón y Sara Marta Fonseca.
La policía política en La Habana aplicó medidas de fuerza para perturbar las tradicionales actividades del domingo de las Damas de Blanco, que suelen asistir a misa y caminar en silencio para pedir la libertad de los presos políticos cubanos.
Saltan las lágrimas de rabia y de impotencia al oir la voz de Berta Soler denunciando la agresión de que estaban siendo víctimas las Damas de Blanco a la salida de la Iglesia de Santa Rita de Casia este domingo.
Una horda de lacayos mangoneados por el régimen gritaron improperios, esgrimieron pancartas, repartieron golpes contra el pequeño grupo, más reducido este domingo por la coacción que sufrieron muchas de sus miembros en los días previos como el vandalismo desatado contra Sara Marta Fonseca cuya casa fue asaltada después de romper con un hacha el candado de la verja que la rodea.
Temprano en la mañana el coronel Samper de la Seguridad del Estado se había personado en casa de la Laura Pollán para intimidarla y advertirle que no podían asistir al santuario este domingo porque no habían pedido permiso como se les había ordenado. A lo que ella contestó: “si quieren matennos, pero vamos a ir”.
Varias mujeres fueron visitadas en sus casas y amenazadas por agentes represores, las viviendas de algunas fueron rodeadas para que no pudieran salir .
Un fuerte operativo policial en los alrededores de la iglesia impidió llegar a otras. Gendarmes de la llamada Policía Nacional Revolucionaria, lista en mano, pedían carnet de identidad a todo el que pasaba para frenar el paso de las valientes.
Ismary Salomón y al menos 10 mujeres más fueron montadas por la fuerza en autos y regresadas a sus vivendas, sin dejarlas siquiera asistir al rito religioso.
Desde horas tempranas el operativo rodeó el recinto católico y a la salida de la misa se inició el acto de repudio.
Las mujeres se enlazaron con sus brazos y se sentaron en el suelo de donde fueron arrastradas a empellones y montadas en un omnibus, preparado de antemano.
Veintitrés mujeres y dos agentes de la seguridad del estado las vigilaban. El autobus iba escoltado por dos vehículos. Laura Pollán comentó !cuántos policías para custodiar 5 mujeres! La voz llena de coraje de Berta reclama‘Somos cubanas y tenemos derecho a caminar por las calles como todos los cubanos, pacíficamente.” Y afirmó ‘hoy somos mas fuertes que ayer y mañana lo seremos aún más.’ También en Banes, provincia de Holguín golpearon y vociferaron contra Reina Luisa Tamayo Danger la madre del mártir Orlando Zapata Tamayo y un grupo de opositores que la acompañaba a la salida de la Parroquia Nuestra Señora de la Caridad.
Y de allí mismo se supo que Marta Díaz Rondón del grupo de apoyo fue detenida desde las 7:20 de la tarde del sábado hasta las 11 de la mañana del domingo para evitar que acudiera a la iglesia de su pueblo.
Que poco hombres son lo comunistas. No tienen honor!!
ResponderEliminarGracias Zurama. Tiens toda la razón.
ResponderEliminarUn abrazo